CUANDO DIOS QUIERE ALGO, LO BUSCA HASTA QUE LO CONSIGUE

Judith de Jesús Sacerdote, la catholictoker mexicana que revolucionó TikTok

En pleno siglo XXI, el de las redes sociales, TikTok vino a hacernos los días de encierro más agradables, pues debido al aislamiento social por el covid-19, muchas personas en todo el mundo encontraron una distracción al aburrimiento.

Con divertidos y curiosos vídeos, la religiosa Judith de Jesús, originaria de Zamora, Michoacán, México; nos invita a conocer y predicar la religión católica.

Jane habla en exclusiva con ella sobre su familia, religión, vida personal y de su sorpresivo éxito en está app llamada: “TIKTOK”.

Y nos explicamos: si bien a las madres siempre las vemos discretas y calladas, o al menos es lo que la mayoría de nosotros tenemos en mente de alguien que practica la religión. Prepárate para conocer la historia de Judith de Jesús, quien con una risa encantadora nos dice: “Es una larga historia… Lo que yo menos quería es ser monjita, si se trata de seguir el camino de Dios, y en segundo lugar es ser maestra y terminé haciendo las dos cosas”, es así como empezamos nuestra entrevista.

Conociendo a Judith de Jesús…

Jane. ¿Qué se necesita para ser una mensajera de Dios?

Judith. Tener a Dios, conocerlo, tener primero la experiencia con él para después comenzar a conocerlo, dejarse empapar por él y entonces sí llevar un mensaje. No puede ser mensajera de Dios sino se tiene la experiencia con Dios primero.

Con mucha alegría Judith de Jesús nos comparte: “Creo que estoy aquí por pura misericordia, yo no me veo sin él. Él es todo para mí, yo no puedo estar fuera de él ni de su seguimiento”.

Judith Martínez Ramírez es su nombre real, ya que cuando una religiosa ingresa a la congregación se le da una advocación que es un término que se le agrega al nombre.

La religiosa combina la iglesia con la escuela, Judith está estudiando la normal para titularse como maestra en educación primaria. “Estoy por ingresar al tercer semestre, voy iniciando en esto. Me va, gracias a Dios muy bien, ahora que estamos en línea, por esto de la cuarentena, se me ha complicado un poco porque yo soy mucho de relacionarme, ver a los compañeros, me gusta mucho la interacción con el grupo; entonces al vivirlo en línea me ha pegado mucho pero estoy adaptándome”, comentó.

Jane. ¿Cómo compaginas el ser madre con la escuela?

Judith. Es algo muy complejo porque antes decía nuestra madre: “Antes de ser estudiantes son religiosas”. Yo antes de ser estudiante soy religiosa, primero está mi comunidad, mi vida como religiosa comunitaria; la escuela también pero no puedo descuidar ni una ni otra.

Por mi personalidad tiendo a hacer muy perfeccionista o exigirme mucho, entonces en la escuela trato de ser muy cumplida y desde siempre he sido “matada”, me gusta tener buenas notas.

Jane. Ya que tocas el tema, me percate que eres una excelente alumna, llevas calificación de 10, ¿Cómo le haces?

Judith. Organización, yo creo que es esa la palabra. La verdad es que la escuela no me cuesta, creo que Dios me dio el don de estudiar… y no es que por eso sea más inteligente, porque ahora sabemos que la inteligencia no se trata solamente por los días, ahora sabemos que hay muchos tipos de inteligencia y hay algunas que no tengo. Dios me ha dado el don de ser muy buena estudiante y comprender la escuela; entonces yo le apuesto mucho a la organización.

Cuando realmente me organizo y le dedico tiempo, todo sale gracias a Dios, es la disciplina que va implícita ahí.

Jane. “No quiero brillar, quiero iluminar”… buena frase, ¿Puedes explicarnos que representa para ti?

Judith. La puse pensando en mi persona. Yo tengo una personalidad muy fuerte que se combina con mi carisma y sé que a donde vaya se me nota.

Yo vivo el lema de mi institución, de nuestros Colegios Motolinía, no es nada más arder por arder, es iluminar. El brillar opaca, cuando alguien brilla puede opacar a los demás, iluminar es compartir luz, ser una antorcha viva. A veces es complicado vivirlo pero se trata de hermandad, de compartir con otras personas reconociendo sus cualidades, dones y talentos.

Familia

Jane. ¿Qué pensó tu familia cuando les dijiste que querías ser religiosa, estuvieron o no de acuerdo contigo?

Judith. Mis hermanos creían que yo estaba jugando porque nadie en la familia lo veía venir por la vida que llevaba, todo era muy normal en mí como cualquier joven que le gusta hacer de todo menos pensar en la vida religiosa. No me creían, ya cuando les cayó el veinte… (Expresión que usamos en México para referirnos a que ya hemos entendido o comprendido) …de que les estaba diciendo la verdad me dieron su total apoyo.

Mis hermanos más chicos no lo entendieron, quizá por la edad, les dio igual, en cambio, el mayor se puso contento y me dijo: ¡Qué padre! … Mi papá pensaba que estaba tratando de huir a situaciones pero cuando se lo compartí me hizo una confesión de que él quería ser sacerdote y no pudo, así que quería que uno de mis hermanos lo fuera, toda la vida le pidió a Dios que tomara a uno de sus hijos, claro, a uno de mis hermanos, no yo.

Después recibí el apoyo de todos, mi mamá me decía que yo no sé qué iba a hacer al convento, que yo iba a correr a las madres o ellas me iban a correr a mí; mi mamá no creía que yo era para esto.

Jane. Ahora que la gente te conoce, ¿Qué te dice tu familia?

Judith. Mis padres y hermanos se sienten muy orgullosos de mí, me lo hacen saber. No sé exactamente cómo lo han tomado, creo que a veces es complicado porque me empiezan a llamar, me empiezan a conocer, yo lo vivo pero a veces me cuesta entender cómo lo viven las personas que me rodean, de hecho, me gustaría preguntárselos a ellos. Y pensativa nos dice: “Me dejas tarea para preguntarles”.

Su historia en TIKTOK

Jane. ¿Cómo surgió la idea de entrar a TikTok?

Judith. Por la cuarentena, no fue que se me ocurriera entrar a TikTok, yo estaba aburrida, enojada, frustrada por mis vacaciones. Cierto día viendo un estado de WhatsApp de una ex compañera dije: ¿Por qué no hacer un TikTok?, abro mi cuenta y me pongo a hacer uno sin saber siquiera cómo funcionaba y de ahí ya vino todo. Siento que Dios me trajo aquí y se valió de esto, de la cuarentena, de mi frustración y de mi enojo para meterme a TikTok pero nunca fue algo planeado.

De Jesús Sacerdote ha tratado de hacer que sus vídeos lleven un mensaje consciente y sobre todo que los temas sean entendibles.

Jane. ¿De dónde surge esa chispa de alegría que te caracteriza al hacer tus vídeos?

Judith. De Dios, yo siento que me ha dado un carisma especial, como nos lo ha dado a todos. Cada uno de los carismas son únicos y todos positivos, todos buenos, la chispa me viene de él, quizás la creatividad viene de él, cuando me dejo tocar por él. Cuando la riego soy yo, cuando cometo un error soy yo y cuando viene algo de chispa es Dios.

Monjita en cuarentena

Jane. Madre Judith, ¿A qué hora y cómo graba sus vídeos?

Judith. En el tiempo que tengo libre, no tengo como tal un horario destinado ya que por la contingencia se ha movido mucho mi horario personal.  Ahora que regrese a la escuela nuevamente tengo que hacer mi horario, quizá dedicar un tiempo más estructurado para TikTok. Esto se ha dado en el  momento que tengo libre, pero ya debo tener algo pensando porque no soy de llegar y ¡pum! que salte la creatividad, hay quien si lo tiene, yo no, soy más de pensarlo y en el momento que tenga libre voy y lo grabo, es así.

Prepárate para recibir tus semillas

Jane. ¿Cómo te preparas para grabar?, ¿Cómo escoges la música, hay un guion o fluye solo?

Judith. Lo de preparar la música, al principio era la que caía, no era tanto de fijarme en la música. Ahora que estoy en un grupo de catholictoker’s, con más sacerdotes y hermanas religiosas  donde nos apoyamos para que sea un poco más discernido, porque también no podemos usar cualquier sonido o hacer cualquier trending topic (tema del momento) no es para nosotros, no es para los católicos.

Hay que checar qué dice el audio de la canción, a veces se me ha pasado uno y he tenido que bajar vídeos porque no me he dado cuenta que los hice, por ejemplo: la canción o la letra, entonces he tratado de preguntar o me dicen: “Esto no lo vayas a hacer por esto…” y cuando se trata de hablar si tengo algo en mente dejo que fluya, que sea espontaneo lo que digo.

Disfrutemos que tenemos vida

Jane. Por cierto, leí en una de tus redes sociales acerca de ser un “influencer católico”, ¿A qué te refieres con eso?

Judith. A veces creemos que un número de seguidores te hace ser influencer pero para ser influencer católico no es necesaria la cantidad de seguidores, la cantidad de vistas y todo lo que se maneja en redes sociales. Para mí ser influencer es hacer que otra persona tenga un cambio de vida, que realmente cambie alguna actitud por influencia mía y que sea yo nada más el medio.

 

“Para mí un influencer católico es ser un puente, una mediación de Dios que comunica mucho de él pero que no quede solo en mi persona sino que al final quien se note sea Dios”

Tener una repercusión positiva, no en millones, al menos en una persona, para mí eso es ser un influencer. Mostrar los valores de nuestra iglesia católica 

Jane. ¿Y quién puede serlo?

Judith. Absolutamente todos, hay que ponernos la camiseta, comenzar a vivir, tener esa coherencia de vida en lo que Dios nos pide, lo que hacemos y expresamos en público; nuestro testimonio.

Éxito y reconocimiento

Jane. ¿Qué te expresa la gente cuando vas por la calle y te reconocen?

Judith. La verdad es que así que yo salga y la gente me reconozca no, aún no pasa. Han sido pocas las personas que me han reconocido y se acercan como si fuera una “celebridad”, se acercan reconociéndome como religiosa y es algo que me ha gustado que me vean como consagrada religiosa o como algunos piensan: “monjita”, lo bonito es que se acercan con mucho respeto y más los niños, me gusta compartir con ellos y que se sientan felices, creo que es lo que más me llena.

Este tipo de cosas, son caricias al corazón - Judith de Jesús Sacerdote

 

Jane. Esperabas que la gente simpatizara contigo…

Judith. Tiendo a caerles bien a las personas, siento que Dios me ha permitido por medio de mi personalidad simpatizar con los demás. Pero es complicado, yo creo que nos pasa a todos, hay personas con quien no y es normal y pasa que uno no se da la oportunidad de conocerlos o no se dan la oportunidad de conocerme a fondo. A veces nos dejamos llevar por primeras impresiones pero tiendo a caer bien, me quedo con eso.

Jane. ¿Has recibido comentarios negativos por hacer TikTok’s?

Judith. La verdad es que sí, crítica siempre va haber. En un principio como todo esto era nuevo para mí, sí me pego muchísimo, bastante y me di cuenta que era por parte de los miembros de la misma iglesia católica, entonces creo que hay es cuando duele un poquito más cuando es de tu misma gente. Creo que la crítica es buena pero sabiendo que es constructiva.

“Cuando una persona me dio una crítica muy fuerte, no fue prudente pero el mensaje fue recibido. Trate de aceptarlo de la mejor manera aunque me dolió mucho, al principio, te seré sincera. Ya con las personas que me rodean y teniendo el apoyo de mi familia y católicos, me siento apoyada”.

Jane. ¿Qué opinión te merecen las personas que te hacen un comentario destructivo en tus redes sociales?

Judith. Que si lo van a hacer, lo hagan con caridad. Siempre que la corrección sea fraterna y que lo hagan en privado, es lo indicado, que de verdad lo hagan de esta manera porque puede llegar a lastimar mucho. 

Jane. ¿Qué te dicen tus compañeras misioneras?, ¿Cómo ven lo que ha pasado contigo?

Judith. Pues nadie lo veía venir, nadie esperaba esto, me siento acompañada por algunas, es normal que no por todas, cada quien tendrá su manera de ver todo lo que ha pasado, no he podido platicar con todas, no sé qué piensan pero aquí en la congregación me siento acompañada. En su mayoría lo ven bien pero me piden que cuide los tiempos de comunidad y que no los descuide.

Jane. Ellas también te han apoyado en vídeos… ¿Cómo se preparan?

Judith. (risas) Es chistoso porque al principio yo era quien les pedía  o mejor dicho comencé a pedirles que si querían  estar en TikTok  o que si querían hacer uno y su respuesta fue un sí, cuando salen es porque quieren estar porque yo se los he pedido y acceden.

Misioneras de Jesús Sacerdote

Sé que les cuesta mucho trabajo a unas más que a otras. Hay hermanas que yo respeto y que me dice: “Yo no quiero hacerlo, siento que no tengo carisma para eso o ya me di cuenta que no me gusta hacerlo”, y lo respeto.

El convento de la alegría

Simplemente demostrar que se puede ser feliz a cualquier edad

Jane. No podíamos dejar ir a la religiosa Judith sin antes preguntarle: ¿Cuáles son tus metas o sueños por cumplir?

“Terminar la licenciatura y hacer mis votos perpetuos”

Judith. (Nos lo platica muy entusiasmada) Quiero ser profesa, ósea quiero ser de votos perfectos, sentirme toda de él, ese es uno y el segundo es terminar la licenciatura y lo padre es que todo va a pasar en el mismo año si Dios me permite.

Y consolidar esto de las redes sociales, creo que es un sueño, yo no lo tenía en mente pero ahora se está proyectando y pienso ser constante. 

“Yo solo sé que cuando Dios quiere algo, lo busca, lo busca, hasta que lo consigue”, finaliza